
El sueño de la IA nuclear de Amazon sigue avanzando. Esta será una de las primeras plantas con reactores modulares – La nación



La inteligencia artificial está multiplicando las necesidades energéticas de los centros de datos y aumentando así el interés de las grandes empresas tecnológicas por fuentes de energía que puedan garantizar el funcionamiento las 24 horas. Amazon ha dado un paso más con Cascade, una central nuclear de nueva generación que pretende transformar la forma en que la compañía opera su infraestructura digital. No se trata de una simple instalación energética: es el símbolo de una ambición que combina autonomía y seguridad energética en plena revolución de la IA.
Esta industria no sólo está cambiando el mercado laboral, sino que también está ejerciendo presión sobre la infraestructura energética mundial. Los grandes centros de datos que procesan millones de operaciones por segundo requieren un suministro constante, y las fuentes de energía renovables, aunque limpias, no siempre garantizan esta estabilidad. Por tanto, la energía nuclear está recuperando importancia como una opción fuerte y libre de CO2. Para empresas como Amazon, el desafío ya no es solo innovar algoritmos, sino también garantizar la energía que los mantiene funcionando sin interrupciones.
Lo que sabemos sobre la planta. La nueva planta de energía nuclear de Amazon, llamada Cascade Advanced Energy Facility, se está construyendo cerca de Richland, Washington. Allí la empresa trabajará con Energy Northwest y X-Energy, responsables del diseño de los reactores. Cascade se construirá cerca de la actual central eléctrica de Columbia. Amazon lo define como un paso importante hacia la reducción de emisiones y el impulso continuo de la red que respalda su infraestructura digital global.
Cascade se basará en el diseño Xe-100 de X-energy, un reactor modular de próxima generación destinado a ser más eficiente y seguro que los modelos tradicionales. La primera fase añadirá 320 MW con cuatro SMR y la planta se podrá ampliar hasta con 12 unidades hasta 960 MW. El proyecto incluye tres fases de 320 MW que ocupan sólo unos pocos bloques. Esta modularidad es una de las claves del proyecto: permite ampliar la producción según sea necesario y ocupa mucho menos espacio que una central nuclear clásica, que puede extenderse a lo largo de más de 2,5 km².
Otro “campus”. A diferencia de las centrales eléctricas convencionales, la central Cascade está organizada como un pequeño campus energético. Sus módulos incluyen edificios de reactores, áreas de servicio, turbinas, condensadores y un espacio para almacenamiento temporal de combustible. Según las proyecciones de X-Energy, el complejo ocupará un área compacta más parecida a una zona industrial que a una instalación nuclear clásica. Este enfoque modular le permite construir y mantener operaciones en fases sin grandes interrupciones para futuras expansiones.
El cronograma de Amazon para Cascade avanza gradualmente. La compañía prevé iniciar la construcción esta década y alcanzar la fase operativa en la década de 2030. Se trata de objetivos preliminares que dependen tanto del proceso de concesión de licencias como del desarrollo industrial de los reactores Xe-100.
Un proyecto que necesita trabajadores. Amazon dijo que Cascade creará más de 1.000 puestos de trabajo en la construcción y al menos 100 puestos permanentes en áreas como ingeniería y operaciones. Paralelamente, Columbia Basin College inaugurará el Energy Learning Center, financiado por el Departamento de Energía, con un simulador que replica los controles del reactor Xe-100. Este programa brindará a los jóvenes de la región acceso a empleos calificados y fortalecerá el papel de Washington en la transición a la energía limpia.
Otras iniciativas. Amazon no es la única empresa tecnológica que ve la energía nuclear como una aliada de la inteligencia artificial. Microsoft ha firmado un acuerdo para reabrir una instalación y simultáneamente está explorando contratos a largo plazo con proyectos de fusión nuclear que aún se encuentran en fase experimental. Google, por su parte, está trabajando con empresas del sector para integrar pequeños reactores modulares (SMR) en su red de suministro. Aunque los caminos son diferentes, todos comparten el mismo desafío: desplegar una infraestructura digital que consuma más electricidad cada año.
Aunque Amazon ha compartido muchos detalles sobre Cascade, el proyecto aún se encuentra en sus primeras etapas. No hay fechas definidas para el inicio de la construcción y puesta en servicio de los reactores. Tampoco especificó qué cantidad de energía se destinará a sus centros de datos y qué parte se integrará a la red local. Todo hace pensar que los próximos años serán cruciales para comprobar si la energía nuclear modular puede alcanzar el ritmo que requiere la inteligencia artificial.
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