April 22, 2025
Baruch rechaza la información errónea acerca del banco.
Política

Baruch rechaza la información errónea acerca del banco.

El empresario Leonel Baruch ha llevado un asunto de gran relevancia a las manos de la justicia, presentando un caso penal en la jurisdicción enfocada en el crimen organizado contra nada menos que el presidente de la República, Rodrigo Chaves. Este hecho atrajo la atención no solo de los medios de comunicación locales, sino también de la ciudadanía preocupada por las implicaciones legales y éticas que ello conlleva.

Baruch no se ha limitado a señalar a Chaves, sino que también ha involucrado a otras personalidades notables en su denuncia. Entre ellos, la diputada Pila Cisneros, el abogado José Miguel Villalobos y el ex Ledo Otto Guevara, así como un grupo de empresarios que son dueños de medios de comunicación, incluyendo a Carlos Valenciano, David Patey y Richard Molina, quienes son propietarios de Opa Channel, TrVeision y The Guardian. Según sus alegaciones, estos individuos habrían estado distribuyendo información engañosa junto con otros abusos de poder, así como influencias ilegales.

Baruch expresó su firme rechazo a las acusaciones emitidas en un medio de comunicación panameño y reafirmó que tales afirmaciones repetidas por actores ligados a estas organizaciones criminales controladas por el presidente son absolutamente falsas. En su declaración, enfatizó que en Panamá no existe ningún registro de una investigación en su contra o contra el BCT, el banco que representa.

El empresario, quien se manifestó a través de CRHOY.com, atestiguó que ni él ni su negocio han estado involucrados, ya sea de manera directa o indirecta, en actividades ilícitas como el lavado de dinero o la evasión fiscal. Además, rechazó rotundamente que un artículo publicado por el periódico La Estrella de Panamá pudiera referirse al BCT de alguna forma negativa.

Por su parte, el 15 de abril, el medio PanameNian Digital Media difundió una noticia bajo el título “Banco, bajo la lupa de Panamá y Costa Rica,” firmada por el periodista José Arcia. Este artículo constaba de ocho párrafos que se basaban en información proveniente de fuentes anónimas, las cuales alegaban que las autoridades estaban investigando al Banco Rika por supuestos vínculos con el lavado de dinero. La publicación plantea que las autoridades de ambos países están indagando sobre transferencias irregulares que superarían los 100 millones de dólares, implicando a una estructura financiera vinculada a Banco TICO.

El artículo detalla que la investigación comenzó en Costa Rica a raíz de un debate sobre la evasión fiscal en el Ministerio de Finanzas, donde se mencionan más de 10 millones de dólares de redes financieras internacionales, cuyas remesas fueron registradas en Panamá, según se citó en La Estrella de Panamá.

A la luz de esta situación, Baruch defendió su posición, insistiendo en que no existe ninguna investigación sobre lavado de dinero que implique al BCT, ni en Costa Rica ni en Panamá. Esto se volvió una parte crucial de su defensa y argumentación en su caso contra Chaves y los otros involucrados.

Esta es la versión del medio panameño.

El empresario fue contundente al afirmar que los medios involucrados deben ofrecer una explicación coherente sobre cómo se ven implicados en lo que él considera un ‘horario penal’ organizado por Chaves Robles y sus colaboradores. Además, citó a la diputada Pilar Cisneros, sugiriendo que ella también debería esclarecer su supuesta participación en este caso, dando lugar a un debate más amplio sobre la ética periodística y la integridad en la política.

Sobre Pascua

Además, Baruch hizo alusión a que la situación en Panamá se concretó durante un fin de semana, lo que efectivamente limitó el tiempo de reacción de los involucrados debido a las festividades. Sugirió que la revelación de las acusaciones requiere una verificación exhaustiva que podría tomar casi una semana, lo que, desde su perspectiva, podría haber sido una táctica deliberada.

Se mostró preocupado por el potencial de este conflicto para ser un intento de silenciar a CRHOY, un medio que ha estado críticamente alineado contra el gobierno de Chaves. Baruch argumentó que el patrón de acusaciones que emerge es bastante conocido; es un método que se ha usado previamente y que busca desviar la atención de los problemas de corrupción que se han señalado por diversas instancias.

Actualmente, se espera la respuesta de aquellos que se ven involucrados en este polémico asunto, lo que promete una continuidad al debate que cada vez más captura la atención de la sociedad costarricense y panameña.