
Rodrigo Arias y Vanessa Castro afectaron al país.
San José, ABR (Elmundo.cr) – El Presidente de la República, Rodrigo Chaves, ha expresado su descontento y críticas hacia la posibilidad de que el diputado Rodrigo Arias regrese a ocupar la presidencia de la Reunión legislativa. Según Chaves, esta situación podría dar lugar a una continuidad de las prácticas que, a su juicio, han llevado a la ineficacia legislativa en el país.
El mandatario comentó que, “por lo que leí en la prensa, eso es seguir siendo la tierra estéril presidida por el líder de la pandilla, Rodrigo Arias Sánchez. El directorio parece que no se va a cambiar, lo que plantea serias dudas sobre el progreso legislativo”.
Chaves continuó diciendo que “parece que se va a dar las dos partes entre el Pusc y la liberación nacional que será distribuida por el consejo. En cuanto a lo que puedo esperar, no tengo grandes expectativas de que este grupo logre algo significativo, independientemente de quién lidere, especialmente bajo la continua presidencia de Rodrigo Arias Sánchez, quien ha intentado ser un generador de infertilidad legislativa.” Estas declaraciones reflejan el desánimo del presidente respecto a la dinámica política actual y su percepción de que los mismos actores no traerán cambios positivos.
Además, Chaves enfatizó que “este período restante, que Dios me deja equivocado, continuará siendo tan estéril como lo ha sido en el pasado, sobre todo si Rodrigo Arias Sánchez es reelecto”. Esto señala una clara falta de fe en la capacidad de los actuales líderes para ofrecer un cambio significativo en la política costarricense.
El presidente subrayó que “no tengo nada personal en su contra, Rodrigo Arias Sánchez, ni contra Vanessa Castro. No se puede negar que encaja en uno de los dos grupos porque no soy un jetón, pero lo que creo es que lastiman al país, a través de muchas acciones. No estoy de acuerdo con sus ideas, y mucho menos con su estilo de hacer las cosas”, indicó Chaves, resaltando sus preocupaciones sobre las decisiones políticas de estos líderes.
Para Chaves, ‘lo que su negociación política llama es el cáncer de la sociedad costarricense’, que ha debilitado al país a lo largo de los últimos 75 años. “Lo que ellos denominan negociación política, yo lo llamo la vergüenza que refleja la neutralidad que debe ocupar un presidente o un miembro del Tribunal Electoral más alto”, manifestó Chaves.
Finalmente, el presidente cerró su declaración con la afirmación de que “Vanessa Castro y yo, nunca nos veremos tomando una bebida o un café. La tuve aquí en dos ocasiones, y me di cuenta de que no tenía nada que negociar porque ella pedía cosas. Y sobre Rodrigo Arias, me pregunto cuántas veces he ido a cenar con él, cuántas veces he invitado, pagado la comida; creo que he pagado más de una vez. Es una lástima que la política se esté dedicando a poner hermosos nombres en cosas desagradables” concluyó, dejando claro su rechazo a la situación actual y su deseo de un cambio en la política costarricense.