Adornos navideños con alma conquistan los hogares costarricenses – La nacion
San José, 7 nov () – Hay símbolos y figuras que recuerdan año tras año que la Navidad es mucho más que luces y regalos. Este diciembre, el Cascanueces vuelve a tomar protagonismo como clásico de la decoración y como guardián de los rituales y recuerdos familiares que dan sentido a la temporada.
Firme, solemne y colorida, representa algo más profundo: la protección del hogar, la magia de la vida cotidiana y la capacidad de volver a ver el mundo a través de los ojos de un niño. Su presencia marca el comienzo de una era donde los detalles importan, donde las tradiciones se salvan y lo simbólico adquiere un nuevo valor.
Junto a él, los pueblos navideños te invitan a detenerte un rato. Se trata de pequeños escenarios llenos de luz, nieve y movimiento, que evocan escenas íntimas de una Navidad de ensueño. Cada casita, cada farol encendido, es una ventana a la imaginación: un pueblo en miniatura donde conviven nostalgia y fantasía.
“Queremos que esta Navidad sea una oportunidad para que las familias se conecten con las emociones que la hacen especial. Los cascanueces y las villas se han convertido en los favoritos porque son una forma de contar historias, traer recuerdos y crear nuevos recuerdos”, explicó Angélica Zamora, asesora de hardware para el hogar de la EPA.
La propuesta navideña de este año quiere ir más allá de la decoración: se trata de darle alma a tus espacios. A través de estos elementos cargados de simbolismo se celebra la belleza de lo simple, lo tradicional y lo perdurable.
Cinco consejos para tu decoración navideña
Decorar es crear ambiente, despertar recuerdos y dar forma visible a lo que sentimos. La Navidad, más que una estación, es una invitación a transformar tu hogar para reflejar lo que valoras.
Consiga una decoración hermosa que también parezca significativa:
- Elige una historia: Más allá de una paleta de colores, piensa en la emoción que quieres evocar: ¿nostalgia? ¿magia? ¿Un recuerdo de infancia? Deja que esa historia guíe tus decisiones.
- Haz del Cascanueces un personaje central: Colócalos en lugares importantes como la entrada o el salón, donde puedas mirar al frente y recibir con presencia.
- Crea una escena vívida con tu villa: Agrupa piezas sobre una base neutra, añade una iluminación suave y juega con alturas o niveles para conseguir una composición que cuente una historia en miniatura. Puedes añadir complementos como árboles para darle más naturalidad al ambiente.
- Luz con intención: Las luces son el alma de la atmósfera. Opta por colores cálidos y colócalos estratégicamente para resaltar los detalles y generar calidez.
- Involucra a tu familia: Deja que cada integrante elija una pieza especial: un Cascanueces, una villa o un adorno con historia. La decoración más bonita es la que se construye entre todos.
En un mundo que a veces avanza demasiado rápido, decorar para Navidad es una forma de volver a lo esencial: a los vínculos, a los recuerdos, a la belleza de los rituales compartidos.
