July 1, 2025
Ante el riesgo de hambruna, la FAO pide acceso inmediato para proteger los medios de vida y la producción de alimentos.
El Mundo

Ante el riesgo de hambruna, la FAO pide acceso inmediato para proteger los medios de vida y la producción de alimentos.

Roma, 12 de mayo (Elmundo.CR) – Ante el grave riesgo inminente de hambruna, el casi colapso total del sector agrícola y la posibilidad de brotes epidémicos en la Franja de Gaza, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) hace un urgente llamado para restaurar de inmediato el acceso humanitario y levantar las restricciones actuales. La situación es crítica y la necesidad de atención es apremiante.

Esta advertencia se emite tras la publicación del análisis más reciente de la Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria en Fases (CIF), que indica que toda la población de Gaza, aproximadamente 2.1 millones de personas, se encuentra en una fase de hambruna crítica, lo que ha sido el resultado de 19 meses de conflicto, desplazamiento masivo y severas restricciones en la asistencia humanitaria. La realidad es preocupante y demanda acciones inmediatas.

De acuerdo con el informe, entre el periodo del 1 de abril al 10 de mayo de 2025, un alarmante 93 por ciento de la población (es decir, 1.95 millones de personas) se clasifica dentro de la fase 3 o superior de la CIF (crisis o peor), de los cuales 244,000 personas (12 por ciento) están en la fase 5 (desastre) y 925,000 personas (44 por ciento) se encuentran en la fase 4 (emergencia). Las cifras son contundentes y reflejan la gravedad de la situación actual.

Durante el periodo proyectado entre el 11 de mayo y finales de septiembre de 2025, se anticipa que toda la población de Gaza enfrentará inseguridad alimentaria aguda en la fase 3 o superior, lo que merecería una respuesta internacional efectiva y coordinada. “La comunidad internacional ahora debe actuar. Es fundamental restaurar el acceso a suministros humanitarios y comerciales a gran escala. Cada día de retraso solo agrava la situación, intensificando el hambre y acercándonos a la hambruna real”, advirtió Qu Dongyu, director general de la FAO.

Qu Dongyu enfatizó la responsabilidad colectiva de garantizar la protección de los derechos humanos en lo que respecta a la alimentación, además de recardar la necesidad de fortalecer los marcos legales que apoyan este derecho. Sin una intervención decidida, existe un gran riesgo de que se socaven principios fundamentales de protección civil.

Restablecer la producción de ganado

Restaurar el acceso humanitario inmediato es crucial para asegurar una mínima producción de alimentos locales, especialmente en el sector ganadero. A pesar de que la FAO ha proporcionado más de 2,100 toneladas de kits de alimentación y atención veterinaria a más de 4,800 pastores en Gaza, estos suministros son insuficientes para satisfacer las crecientes necesidades. La FAO y sus socios están listos para enviar más recursos en cuanto se autorice el acceso.

Lamentablemente, la producción de ganado comercial se ha detenido prácticamente, reduciéndose a la producción doméstica para el consumo propio. A pesar de la significativa reducción en el número de animales (con una disminución del 36% en ovinos, del 39% en caprinos, del 3.8% en el ganado vacuno y aviar, y un alarmante 79.5% en animales de trabajo), los pocos ejemplares restantes son vitales para la seguridad alimentaria de las familias, dado que representan la única fuente accesible de leche, huevos y carne.

Tras la prohibición de todos los suministros humanitarios y comerciales, se estima que entre un 20 y un 30 % del ganado ha perecido. El cuidado y protección de los animales restantes es crucial para evitar pérdidas irreversibles que podrían aniquilar por completo los medios de vida de los agricultores y pastores de la región. Sin el acceso a nutrición adecuada o atención veterinaria, los pastores no solamente perderán una fuente crítico de alimentos, sino que los animales también pueden convertirse en vectores de enfermedades, lo que plantea un grave riesgo para la salud pública, especialmente para aquellas personas que cohabitan con ellos. Un acceso inmediato es esencial para evitar mayores pérdidas, mantener niveles básicos de nutrición y proteger la salud pública.

Agricultura, a punto de colapsar

Antes de octubre de 2023, alrededor del 42 % de las tierras en Gaza (más de 15,000 hectáreas) estaban dedicadas al cultivo, a actividades agrarias y pastos. Sin embargo, una evaluación geoespacial realizada por la FAO entre octubre y diciembre de 2024 indica que el 75 % de los bosques de cultivo y olivos han sufrido daños significativos o han sido destruidos, lo que añade un estrés adicional al ya crítico sistema agrícola.

Además, a principios de 2025, más de dos tercios de los pozos agrícolas de Gaza (un total de 1,531) que dependen del agua subterránea para el riego han dejado de funcionar, lo cual exacerba aún más la situación en lo que respecta al riego y la capacidad agrícola. Se está llevando a cabo un nuevo informe por parte de la FAO y la OAT, y las primeras indicaciones sugieren una reducción adicional en las tierras agrícolas utilizables, dejando cada vez menos espacio disponible para la preservación o recuperación de los cultivos y la producción.