December 13, 2025
Desde hace años, la publicidad televisiva se hace más ruidosa sin violar ninguna ley. España ha decidido que esto se acabó

 – La nación
Tecnología

Desde hace años, la publicidad televisiva se hace más ruidosa sin violar ninguna ley. España ha decidido que esto se acabó – La nación

Una experiencia común entre millones de espectadores: estás viendo tu serie favorita a un volumen cómodo cuando de repente aparece un anuncio y te ves obligado a lanzarte de cabeza hacia el mando a distancia. Este shock calculado puede haber llegado a su fin en España gracias a criterios técnicos cuantificables de seguimiento del volumen de publicidad.

La ley. La Comisión Nacional del Mercado y la Competencia ha establecido, por primera vez, una serie de criterios para que el nivel sonoro de los bloques publicitarios no supere al de los programas, según señala el comunicado Acuerdo INF/DTSA/083/25 publicado el 20 de noviembre de 2025. El reglamento amplía la regulación a este efecto a partir del verano de 2025 La TDT rige todo el ecosistema audiovisual: plataformas de vídeo en streaming como YouTube y servicios bajo demanda, aplicaciones de música como Spotify, televisión de pago y emisoras de radio convencionales y digitales.

El regulador advierte de que el incumplimiento constituye una infracción leve y en casos graves puede acarrear sanciones de hasta 200.000 euros.

El engaño técnico: dB vs. LUFS. La industria publicitaria lleva décadas aprovechando una grieta en la medición tradicional del sonido. Los decibelios tradicionales capturan la amplitud eléctrica de la señal, pero ignoran un factor crucial: cómo el cerebro humano procesa esta información sonora. Dos grabaciones pueden mostrar valores idénticos en un medidor de pico convencional y, sin embargo, una se percibirá significativamente más fuerte que la otra.

El secreto está en la composición de frecuencias. Nuestro sistema auditivo reacciona de manera desigual según el tono: las frecuencias medias (especialmente entre 1 y 4 kHz, donde se concentra la voz humana) nos resultan mucho más audibles que los graves profundos o los agudos extremos. Esta propiedad fisiológica permite a los anunciantes crear mensajes que suenan más fuertes sin violar los límites técnicos de decibeles.

El nacimiento del LUFS. La solución llegó cuando la Unión Internacional de Telecomunicaciones publicó esto Estándar UIT-R BS.1770ficticio en agosto de 2010 de la Unión Europea de Radiodifusión. Este sistema introduce las LUFS (Unidades de sonoridad relativas a la escala completa), que Incluir un filtro de ponderación K, que matemáticamente representa la sensibilidad del oído. El resultado: una medición que refleja la percepción real, no sólo la energía eléctrica.

España se une a Europa. Él Real Decreto 250/2025La ley aprobada en marzo estableció por primera vez un parámetro objetivo para la TDT española: -23,0 LUFS con una tolerancia de ±1,0 LU (Unidad de Sonoridad). Este valor no es arbitrario, sino que corresponde exactamente al valor normalizado que la Unión Europea de Radiodifusión recomienda desde 2010. Ahora la CNMC ha dado el siguiente paso y ha ampliado estos criterios más allá de la televisión tradicional.

Implementación. El regulador español ha optado por un enfoque gradual. La CNMC no exige a las plataformas volver a codificar inmediatamente millones de horas de contenidos históricos. El documento permite a los operadores adoptar “criterios técnicos que proporcionen un nivel de protección equivalente”, una fórmula flexible que tiene en cuenta las características de cada medio. Sin embargo, la implementación enfrenta obstáculos complejos.

Mientras que las emisoras de televisión tradicionales controlan cada segundo de la emisión desde una sala de producción, la Transmisión Trabaja con arquitecturas distribuidas en las que la publicidad se inserta de forma dinámica a través de sistemas programáticos. YouTube, por ejemplo, alberga contenido creado por millones de usuarios utilizando una variedad de equipos, desde estudios profesionales hasta Teléfonos inteligentes. En esta maraña, el seguimiento técnico de cada anuncio insertado en tiempo real se convierte en un importante desafío logístico.

Foto por Vadim Babenko En desempaquetar / Elyas Pasban En desempaquetar