
Lo que perdió en primera ronda de Copa Centroamericana – La nación
La Liga Deportiva de la Alazelence cubrió su clasificación a los cuartos de final de la Copa Centroamericana, pero no acostumbrada. En su grupo, el campeón de dos tiempos del torneo, avanzó al segundo lugar detrás de Plaza Amador, y eso significa que perdieron una ventaja prominente: el derecho a cerrar todas las series en casa.
En las ediciones 2023 y 2024, la liga fue el líder de la fase de grupos y la mesa general, asegurando jugar cada una de las rondas clave en Morera Soto. Ese elemento fue pesado, porque los manudos se fortalecieron por la presión de su pasatiempo y condujeron a un campeonato de dos tiempos.
Ahora, Panorama cambia. Para encontrar el tricomplión de Alazelence para viajar más pronunciados, y el beneficio de los lugareños depende de otros resultados.
¿Cómo se puede recuperar esa liga de privilegios?
La situación que puede devolverse a rojo y negro es la posibilidad de cerrar en casa pasa por la composición:
-
Kartenes eliminó la Olympia del líder del escenario regular.
-
La liga misma excede la habitación en las habitaciones.
-
Y el rival en la otra llave de la sala no avanza en la tabla general.
Si se cumplen estas condiciones, los monudos pueden jugar una serie segura en Morera Soto.
Golpe financiero
Además de perder el área asegurada, la alazilencia permitió escapar de los ingresos directos. Cada grupo recibió por primera vez contras 40,000 como un título de CONCACAF, esta vez la cantidad fue a las arcas de la Plaza Amadar.
En un club con consistencia financiera, esos recursos siempre agregan. Y a pesar de que la liga es administrada por las cuentas ordenadas, el dinero perdido es otro recordatorio de que cada detalle contando en torneos, la demanda es máxima.
En este momento, la verdad es que el borde del error es bajo. “Este torneo se juega como el final de la primera fase, y ahora tenemos que estar listos para no venir”, dijo Oscar Ramrez, la protección de los campeonatos de dos tiempos no es la misma armadura que antes.
La liga todavía está luchando, pero sin la ventaja que ha venido con ella en las últimas dos coronas: el poder asegurado de El Morera y el resto de los premios económicos, entre otros.