
Los trabajadores de Ford en Alemania inician su primera huelga en casi un siglo.
Colonia (Alemania), 12 de mayo (DPA) . Los empleados del fabricante de automóviles estadounidenses Ford en Colonia, Alemania Occidental, llevarán a cabo una serie de protestas este miércoles y jueves, impulsados por un plan de recortes anunciado por la dirección de la empresa. Esta será la primera ocasión en casi un siglo de historia de la planta en la que se producirá un movimiento de este tipo, según lo indicado por la Unión IG Metall.
La planta Ford en Colonia cuenta actualmente con un total de 11,500 empleados. Sin embargo, la dirección de la compañía ha manifestado su intención de eliminar 2,900 puestos de trabajo para finales de 2027 como parte de una estrategia para reducir costos. Esta decisión ha sido recibida con un fuerte rechazo por parte del sindicato, que considera inaceptable la pérdida de empleos en una industria ya golpeada por múltiples desafíos.
IG Metall ha denunciado que la administración de la planta no presenta un plan viable que garantice la continuidad de la subsidiaria alemana de Ford, lo que pone en riesgo el futuro de muchos trabajadores. El sindicato está exigiendo la implementación de un acuerdo social que contemple no solo compensaciones adecuadas para los empleados afectados, sino también ciertas garantías financieras que protejan a la fuerza laboral en estos tiempos inciertos.
En los meses de marzo y abril se llevaron a cabo breves interrupciones en la producción, pero las negociaciones entre el sindicato y la dirección se estancaron rápidamente. Como resultado de esta falta de progreso, el sindicato tomó la decisión de convocar a una votación entre los miembros de Ford la semana pasada, la cual arrojó un respaldo masivo: el 93.5% de los trabajadores de IG Metall están dispuestos a realizar una huelga para aumentar la presión sobre la dirección y así hacer valer sus reclamos.
A pesar de la situación, la influencia de los gerentes alemanes de la planta Ford en Colonia es limitada, ya que la compañía depende en gran medida de las decisiones de su matriz estadounidense. Ante esta realidad, los directivos de Ford han llamado a cuestión las garantías de los trabajadores, elevando así la presión sobre esta subsidiaria en Alemania.
El Grupo Ford tiene una sólida presencia en el sector de vehículos comerciales y automóviles como el Transit. Sin embargo, la producción europea de la compañía se ha concentrado esencialmente en el sector automotriz, que ha sido un área de pérdidas consistentemente para el fabricante estadounidense. A pesar de que el Ford Fiesta, un modelo fabricado en Colonia, ha sido un éxito en ventas durante décadas, su producción se detuvo en 2023, lo que ha puesto en evidencia una crisis en la oferta de productos.
Actualmente, la planta se dedica a la fabricación de dos modelos de automóviles eléctricos; sin embargo, las ventas en este segmento han sido decepcionantes, muy por debajo de las expectativas establecidas inicialmente. Según los datos más recientes, la participación de mercado de Ford en el sector de automóviles inscritos en Alemania para 2024 se situaba en apenas un 3.5%, lo que representa una caída de 1.5 puntos en comparación con el año 2022, lo que plantea serias dudas sobre su futuro.
Los expertos de la industria automotriz advierten que el futuro de Ford en el mercado europeo se presenta sombrío. Ferdinand Dudenhöffer, director del Centro de Investigación Motor, expresó su preocupación: “La situación es mala y las perspectivas son aún peores. Ford es demasiado pequeño en el sector automotriz para operar de manera rentable en Europa; esta es la realidad actual y es probable que así continúe en el futuro”.
Dudenhöffer también mostró un pesimismo profundo respecto a las operaciones de Ford en Europa, señalando que las unidades vendidas son extremadamente bajas y que, con los altos costos laborales, la viabilidad de la empresa se ve comprometida. “Ford se está volviendo cada vez más irrelevante en este contexto, hasta el punto de que su presencia en Europa no justifica el modelo actual de operaciones”, concluyó con su severa evaluación del futuro de la marca en el continente.