November 7, 2025
¿”Show judicial” o antecedentes de corrupción? Comienza juicio por el caso Cuadernos contra Cristina Fernández

 – La nación
El Mundo

¿”Show judicial” o antecedentes de corrupción? Comienza juicio por el caso Cuadernos contra Cristina Fernández – La nación

Por Eumar Esaá

Desde arresto domiciliario donde cumple condena por el caso conocido como Tráfico Vial, Cristina Fernández se presenta a un nuevo juicio por corrupción a partir del 6 de noviembre. La expresidenta argentina responde, junto a otros 86 imputados, al caso Cuadernos, en el que enfrenta cargos de cohecho, por liderar una trama de sobornos para la adjudicación de contratos de obras públicas. El líder peronista calificó el proceso como un “espectáculo judicial”.

Cristina Fernández vuelve a estar en el punto de mira de la justicia. Luego de ser condenado a seis años de prisión por irregularidades en la ejecución de obras viales en la provincia de Santa Cruz a favor del empresario Lázaro Báez, el expresidente vuelve a ser juzgado, ahora por el llamado caso Cuadernos.

En el mismo caso aparecen otros 86 imputados: 65 empresarios y 21 funcionarios que formaban parte de una red, presuntamente liderada por la expresidenta y su difunto marido, el también expresidente Néstor Kirchner, que cobraban sobornos a cambio de contratos de obras públicas.

El nombre Cuadernos o “cuadernos de sobornos” se debe a las notas de un directivo, Oscar Centeno, quien registraba los traslados de funcionarios que llevaba para recibir sobornos en efectivo y luego entregarlos a otros puntos, como la residencia presidencial de la Quinta de Olivos y un departamento de Fernández en el exclusivo barrio de Recoleta.

El fiscal Carlos Stornelli intentará demostrar que Kirchner lideró una asociación ilícita que derivó en el intercambio de 38 pagos por más de 17 millones de dólares y 1,5 millones de pesos, y otros seis por sumas de dinero no especificadas en la causa judicial, que prácticamente se ejecutaron.

Esta primera parte del proceso requerirá de varias audiencias, ya que en la del 6 de noviembre sólo se pudieron leer 132 páginas de las 678 que forman parte del primer caso, y en la audiencia se revisarán un total de seis casos.

El remordimiento y la investigación periodística alimentan el caso

En la acusación, Fernández de Kirchner aparece como “coautor de 204 sobornos pasivos” y “participante esencial del cohecho pasivo”.

Según la investigación, los empresarios del banquillo pagaron sobornos o entregaron obsequios a funcionarios públicos de distintas jerarquías para obtener el otorgamiento de concesiones ferroviarias y viales en general. También acordaron inflar artificialmente los precios en sus ofertas públicas de obras públicas.

El caso es derivado del que siguió en 2017 contra el exministro de Planificación Federal, Julio De Vido, y el exsubsecretario de ese despacho, Roberto Baratta, por irregularidades en la adquisición de Gas Natural Licuado para el programa Energía Total, por el que fueron condenados a cuatro y tres años de prisión, respectivamente.

Durante este proceso, la ex esposa del directivo Centeno, Hilda Horowitz, fue llamada a declarar y, temiendo ser implicada, entregó los ocho cuadernos que contenían 12 años de registros a un amigo, quien a su vez los filtró al diario ‘La Nación’.

La investigación sobre la publicación estuvo a cargo del fiscal Stornelli y el fallecido juez Claudio Bonadío, e incluyó peritajes para verificar la autoría de las notas, en medio de acusaciones de la defensa de Fernández de que los cuadernos habían sido alterados.

También estuvo alimentada por la denuncia de varios empresarios arrepentidos, como Ángelo Calcaterra, Aldo Roggio, Juan Carlos de Goycoechea o Carlos Wagner, parte de una multitud de empresarios que ofrecieron detalles de sus prácticas para ayudar a determinar la ruta de la circulación de los sobornos.

Durante el juicio, la fiscalía deberá respaldar los anotaciones en los cuadernos de Centeno, quien es uno de los imputados, con transacciones bancarias de los involucrados y centrales telefónicas para validar las fechas de las reuniones.

Los más de 160 abogados defensores que intervienen en el proceso intentarán demostrar el argumento de que las notas fueron falsificadas, a partir de las modificaciones, tachaduras y diferentes caligrafías detectadas durante el peritaje.

Los representantes legales de Fernández, Carlos Alberto Beraldi y Ariel Llernovoy, intentaron sin éxito que el caso se anulara ya en 2023, citando cambios detectados por la Policía Federal y la Universidad de Buenos Aires.

Una cortina de humo

La expresidenta Cristina Fernández apeló a ella JavierMiley.

Según Fernández, la “operación cuadernos truchos” (fraudulenta), que a su juicio fueron “reescritas 1.500 veces”, quedó en suspenso, “siempre lista para descongelarse cuando fuera necesario”, y llegó el momento en que estaba en juego “el futuro del trabajo y la jubilación”.

Milei aprovechará los buenos resultados de las elecciones legislativas de medio término para avanzar en sus reformas en busca del equilibrio fiscal, sentando las bases que viabilicen las ayudas financieras que, según Fernández, “hipotecan el presente y el futuro de varias generaciones”.

En su carta, Fernández también se refirió al ministro de Justicia de Milei, Mariano Cúneo Libarona, quien presentó su renuncia al gabinete a fines de octubre. “Si no me creen, pregunten” Cúneo, recomendó.

El expresidente recordó que fue abogado “de uno de los empresarios detenidos y chantajeados” (Sergio Taselli), y aseguró que le recomendó “mentir” e “implicar a alguien” para salir bien del proceso.

Con EFE y medios locales