May 24, 2025
Sure! Could you provide a bit more context or specify what you’d like to convey about “bosques”?
Tecnología

Sure! Could you provide a bit more context or specify what you’d like to convey about “bosques”?

La Agencia Espacial Europea ha lanzado recientemente una innovadora misión dedicada a la observación de la Tierra. Este satélite, equipado con el primer radar de apertura sintética de tipo P, está destinado a medir la biomasa de los bosques que cubren nuestro planeta. A través de esta tecnología avanzada, se busca obtener datos precisos sobre la cantidad de carbono que los bosques almacenan en todo el mundo, contribuyendo así al entendimiento del ciclo del carbono.

Un lanzamiento exitoso. La misión de Biomass fue oficialmente inaugurada el 29 de abril a las 11:15 a.m., cuando despegó con éxito del puerto espacial de Kourou en la Guayana Francesa. Este lanzamiento se realizó a bordo de un cohete Vega-C, marcando su regreso a la actividad después de un período de retraso de dos años debido a fallos en un vuelo anterior. La importancia de esta misión radica en el avance significativo que representa en la observación terrestre.

Menos de una hora después de su lanzamiento, el satélite Biomass logró separarse del vehículo lanzador y emitió su primera señal, confirmando que todos los sistemas funcionaban correctamente. Con esto, la misión se integra oficialmente en las iniciativas de exploración de la Tierra de la ESA, trabajando en el avance de la ciencia relacionada con nuestro planeta.

El desconocido mundo de los bosques. Actualmente, se estima que los bosques cubren casi un tercio de la superficie terrestre, siendo conocidos popularmente como “el pulmón verde del planeta”. Esto se debe a que desempeñan una función vital en la absorción y almacenamiento de grandes cantidades de dióxido de carbono: aproximadamente 8,000 millones de toneladas netas al año, lo que contribuye a la regulación de la temperatura global.

Sin embargo, la deforestación, la extracción de recursos forestales y los cambios en el uso del suelo, especialmente en regiones tropicales donde se alberga el 70% de la biomasa terrestre, están liberando carbono de nuevo en la atmósfera y exacerbando el calentamiento global. Uno de los problemas más críticos es que no hay un conocimiento claro sobre cuánto carbono almacenan realmente los bosques, ni sobre cómo responden a factores como el aumento de la temperatura, el incremento del CO2 en la atmósfera y las actividades humanas que afectan su salud.

El papel fundamental de Biomass. Este satélite se posiciona como una herramienta clave, ya que medirá con una precisión sin precedentes la cantidad de biomasa, y por ende, de carbono que se almacena en los bosques de la Tierra. Además, su tecnología permitirá estudiar cómo esta biomasa cambia a lo largo del tiempo, ayudando a comprender de manera más profunda el ciclo del carbono y los sistemas climáticos de nuestro planeta.

Se estima que una porción significativa del carbono, alrededor del 50% del peso de un árbol, se encuentra almacenado en su madera, que incluye troncos, ramas y tallos. Gracias a su exclusivo radar ubicado en la banda de P, Biomass tiene la capacidad de medir la cantidad de madera en estos bosques de manera global y con una precisión excepcional, todo desde el espacio.

Innovación en radar. La verdadera innovación detrás de Biomass radica en su instrumento principal, desarrollado por Airbus: un radar de apertura sintética (SAR) que opera en la banda P. Este tipo de radar utiliza microondas y capta el eco que rebota sobre las superficies. La longitud de onda utilizada es significativamente mayor que la de otros satélites de radar, como el Sentinel-1 (en banda C) o el futuro NISAR (en banda L).

Esta longitud de onda permite que el radar penetre en la densa cobertura forestal, incluso atravesando nubes o precipitaciones, interactuando directamente con las partes leñosas de los árboles y el suelo del bosque. Al medir cómo se dispersa la señal de radar al chocar con estos elementos, los científicos pueden obtener información detallada sobre la estructura del bosque, su altura y, sobre todo, calcular el volumen de material leñoso presente en él.

Una maniobra compleja. Para poder proyectar esta señal de radar con eficacia, Biomass contará, en los próximos días, con una impresionante antena de reflexión de 12 metros de diámetro y un brazo de 7.5 metros. Esta maniobra resulta crucial para el éxito de la misión, considerando la complejidad involucrada en su ejecución.

Biomass llevará a cabo su misión en dos fases principales durante un total de cinco años y medio. La primera fase será de tomografía, con una duración de 18 meses, en la que se realizarán múltiples pasadas sobre las mismas áreas desde diferentes ángulos. Esto permitirá crear un modelo 3D de la estructura de los bosques. La segunda fase será interferométrica y tendrá una duración de cuatro años, donde las diferencias entre las señales se utilizarán para medir los cambios en la altura y densidad de los bosques, lo que facilitará la evaluación continua de la biomasa.

Imagen | Fotografía de ESJM

En Xataka | Un estudio de imágenes satelitales ha demostrado que las áreas en las que la jungla podría recuperarse podría recuperarse. Sin ayuda humana